9 de la mañana. Luego de echar un vistazo por la ventana celebro el antojo solar de permanecer en cama, y como el día no promete ser caluroso me hace proyectar un agradable y tranquilo paseo. Malecón en Miraflores El punto de partida es Miraflores: un distrito de mucho movimiento peatonal y vehicular pues, además de haberse convertido en un paso obligado para cruzar la ciudad de un lado al otro, es un barrio donde abunda el comercio. Este alboroto mañanero nos hace cruzar inicialmente por calles un poco agitadas pero nada que la prudencia del ciclista no pueda manejar. Somos literalmente 4 gatos quienes vamos en fila india siguiendo al guía durante el recorrido en dos ruedas por una parte de la bahía limeña. Llegamos finalmente al malecón y nos detenemos un instante para que el atento muchacho que nos guía nos ilustre un poco sobre la historia limeña y de cómo el lugar fue tomando la forma que actualmente conocemos. El día está un poco oscuro y por ratos una brisa fría hace que
Rollitos de la Gorda...